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Museo Tomi Ungerer

El ilustrador, escritor y artista gráfico Tomi Ungerer, fallecido en 2019, tiene su propio museo en Estrasburgo, su ciudad natal. Se inauguró en noviembre de 2007 en la Villa Greiner y alberga una gran colección de dibujos y grabados originales de Ungerer en 700 metros cuadrados: unos 8.000 gráficos, dibujos y carteles se exponen en el museo, denominado oficialmente Centro Internacional de Ilustración.

Tomi Ungerer

El mundialmente famoso dibujante e ilustrador Tomi Ungerer nació en Estrasburgo en 1931 y vivió, al menos en parte, en la ciudad hasta su muerte en febrero de 2019. El artista bilingüe era un europeo convencido; sus primeros años le llevaron no sólo a Europa, sino también a Argelia, como marinero en el Atlántico Norte y más tarde a Estados Unidos. Allí ganó un primer premio en 1957 por su primer libro infantil ilustrado, "Los mellizos vuelan". Ese mismo año se incorporó a la editorial suiza Diógenes, donde sus libros se siguen publicando en la actualidad. Además de los libros infantiles, también dibujó carteles de películas, material erótico y anuncios publicitarios. En total, realizó unos 40.000 dibujos y más de 140 libros.

El Museo de la Villa

La Villa Greiner, que alberga el museo, fue construida en la década de 1880 y está situada cerca de la plaza Broglie, donde se encuentra la fuente de Jano de Ungerer. En los años 50, la villa era la sede de la RTF, la radiotelevisión pública francesa. En 1963, pasó a ser propiedad de la ciudad de Estrasburgo y tuvo varias funciones. Finalmente, en 2007, se inauguró aquí el museo.

El trabajo de Ungerer en varios niveles

En la planta baja del Museo Tomi Ungerer se presentan las ilustraciones y los famosos libros infantiles y se explica la biografía del artista. Los carteles publicitarios y los dibujos satíricos, que, por ejemplo, tratan de la segregación racial en Estados Unidos o de la guerra de Vietnam, se exponen en la primera planta. El sótano, en cambio, contiene obras que tratan los temas de la muerte y el erotismo.

Exposiciones cambiantes

Además de la colección permanente de obras de Tomi Ungerer, la villa acoge también exposiciones temporales, la mayoría de ellas centradas en otros ilustradores contemporáneos. Pero no sólo estas exposiciones cambiantes hacen que merezca la pena repetir la visita: debido a la sensibilidad a la luz de la mayoría de los dibujos y grabados, se cambian al menos tres veces al año. Esto significa que los visitantes siempre tienen la oportunidad de ver nuevas obras.