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Castillo de Praga

Ciudad de Praga

Situado en el casco histórico, en la llamada Colina del Castillo de la capital checa, el Castillo de Praga es el mayor complejo de castillos del mundo, con una superficie de 45 hectáreas.

Fundado en el siglo IX, el castillo fue la residencia de los duques y reyes de Bohemia. Varios emperadores (el emperador Carlos IV, Rodolfo II y Fernando I) residieron en él. Después de 1919, fue la sede permanente de los presidentes checoslovacos y más recientemente, desde 2013, la residencia del Presidente de la República Checa. El edificio eclesiástico más grande de la República Checa, la Catedral de San Vito, se encuentra en el centro del recinto del castillo.

Las distintas fases de construcción del Castillo de Praga

El castillo ha cambiado una y otra vez a lo largo de su historia. Numerosos maestros de obras de diferentes estilos arquitectónicos han contribuido a su construcción. La construcción y la ampliación tuvieron lugar desde el siglo IX hasta el XII, principalmente en cuatro fases, A-C:

  • Primera fase de construcción (A): Inicio de la construcción del castillo en 885 - Fundación de la iglesia de Santa María.
  • Segunda fase de construcción (B1): Construcción de una muralla de madera-tierra de 5 y 6 m de ancho - Cimentación de la basílica de San Jorge - Construcción de la rotonda de San Vito
  • Tercera fase de construcción (B2-Bx): Diversas modificaciones - Ampliación de las fortificaciones exteriores del castillo mediante una muralla de madera de 12 m de ancho
  • Cuarta fase de construcción (C): Comienza la construcción del castillo de piedra con el levantamiento de un muro de sillería de 3 m de ancho - Rediseño del palacio real - Construcción de la nueva catedral de San Vito
  • Gótico tardío y Renacimiento: Ampliación del castillo - Construcción de la Sala Vladislav
  • Reformas en los siglos XVIII y XIX: Nueva construcción del patio de entrada
  • Renovaciones en el siglo XX: Ampliación o reconstrucción del castillo como residencia presidencial

Las vistas del Castillo de Praga

El castillo, que consta de tres patios, tiene numerosos atractivos. La mejor manera de acceder al complejo del castillo es desde la plaza Hradčany. En los pedestales junto al portal de entrada monumental hay dos enormes figuras llamadas "Gigantes luchadores". Dos guardias del castillo se sitúan frente a ellos. Cada hora en punto tiene lugar un pequeño cambio de guardia ceremonial y cada día a las 12:00 horas un gran cambio de guardia.

En el primer patio, el más interior del castillo, se puede visitar la catedral gótica de San Vito con la cripta real, la sala gótica Vladislav y el monolito Mrákotín (obelisco que conmemora a las víctimas de la Primera Guerra Mundial).

En el segundo patio del castillo hay otros lugares de interés, como la puerta barroca de Matías que da acceso al patio del castillo, el Palacio Real barroco, la capilla barroca de la Santa Cruz y una galería barroca del castillo con obras de Rubens, Tiziano, etc.

En la Plaza de San Jorge, la Basílica de San Jorge merece una visita. La Torre de la Pólvora de Mihulka y las dos torres góticas, la Torre Blanca y la Torre del Hambre, también merecen una visita. El callejón dorado entre las dos torres de la muralla interior del Castillo de Praga es una visita obligada. Se dice que en una de las pequeñas casas construidas allí, el emperador Rodolfo II encargó a los alquimistas que produjeran oro para él.

Por último, pero no por ello menos importante, merece la pena desviarse a los jardines que rodean el Castillo de Praga, por ejemplo, el Jardín Real o el Jardín del Paraíso. En el Jardín Real se puede visitar el palacio de recreo de la reina Ana, la fuente cantante y un invernadero.